viernes, 28 de febrero de 2014

INSCRIPCIÓN.




INSCRIPCIÓN
Por: Alonso Quintín


Mi pueblo de malba y mejorana
tiene aromas de guayabas y de yátagos;
sabe a amasijo y a copla buragueña
tiene el candor de virginales causas.

Mi pueblo traza caminos de herradura
con jirones de ruanas y alpargatas;
y en los pliegues de una muselina
danza un sueño sensual de serenatas.

Mi pueblo tiene aromas de trapiches y caneyes
sueña balcones de arcádicas pasiones
y en un corazón de de bugavilias y azafranes
cuelga el tiple en secreto sus amores.

Mi pueblo se repliega con tesón a la montaña
y despierta con oraciones de jilgueros.
quién pudiera en los cantos de sus héroes,
guardar por siempre el clamor de los abuelos.

Pueblo de plenilunio y verticales armonías
de violines encantados en cumbres invioladas
con vuelos de águila haciendo crucigramas
en cielos vaporosos teñidos de campanas.

Pueblo de místicos arreos y divinas esperanzas
donde Dios se recrea en la suave veneración  de los trigales.

1 comentario:

  1. Este texto debió leerse en las pasadas festividades por la reina de Huertas. De algún modo las palabras perduran, después de esos días y noches convertidas en abrazos y empinadas alegrías.

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